Mujeres por siempre

Es innegable que las mujeres han sido las musas para crear diversas canciones y piezas musicales. Para muestra basta un botón. Apenas el día 5 del pasado mes de febrero falleció lamentablemente unos de los compositores más prolíficos de la música mexicana: Rubén Fuentes.

Este compositor jalisciense tuvo en su obra más de trescientas canciones, y aunque la mayor parte de su repertorio es de canción vernácula, escribió temas maravillosos dedicados a las mujeres, como “La Bikina”, “Cien años” o “Flor sin retoño”. Asimismo, grandes cantantes femeninas, como Lucha Villa, Lola Beltrán, María de Lourdes, Vicky Carr y Rocío Dúrcal, entre otras, hicieron hermosas versiones de sus canciones.

Pero no siempre se crearon canciones para ellas, para las intérpretes femeninas. También a lo largo de la historia han existido grandes compositoras. Desde el siglo XVI, con Francesca Caccini, hasta formidables compositoras de nuestros días. Se me viene a la memoria Consuelo Velázquez y su “Bésame Mucho”, traducida a más de 20 idiomas y con innumerables versiones, entre ellas hasta una versión de los mismísimos Beatles.

Y qué decir de las grandes intérpretes de nuestra época, mujeres verdaderamente extraordinarias no sólo por sus interpretaciones, sino por el esfuerzo que hicieron para colocarse en el mundo de la canción y porque vencieron episodios trágicos a lo largo de sus vidas. Como por ejemplo Edith Piaff, quien nació en la calle, fue criada por prostitutas, y mucho tiempo de su vida se dedicó a cantar en la calle como lo hacía su madre, explotada por su padre, hasta que la descubre Louis Leplée, quien le da el sobrenombre de “Piaf”, que significa “gorrión” en francés, y la lleva a cantar a su lugar. No podremos olvidar nunca su versión de “La vie en rose”, o “Non, Je Regrette Rien”.

Así existen muchos casos. Como Janis Joplin y sus serios problemas de personalidad y autoestima desde niña, los excesos de alcohol y drogas que la llevaron a su destino trágico, pero que dejó un legado asombroso en el movimiento hippie y del rock & roll.

Tina Turner, maltratada, golpeada y explotada por Ike Turner, quien en su tiempo fue su marido y formó un dueto con ella hasta que Tina logró separarse con mucho esfuerzo y llegó a ser parte muy importante del movimiento pop, y hasta la fecha, aunque ya se retiró, la energía de su música sigue vibrando.

Lo que quiero decir, queridos amigos (as), es que las mujeres siempre han sido y seguirán siendo parte de la música del mundo y de su historia, no sólo como inspiradoras, sino como personas activas en la sociedad, y dan testimonio de lo que de repente es tan difícil para ellas. Lo más importante es ver cómo muchas mujeres encuentran en la música, ya sea componiendo o interpretando, sanación y cura a heridas que nada tienen que ver con el arte, pero que este bello arte de hacer música las libera y consuela llenándonos a todos los espectadores de una admiración y respeto por ellas.

Lo cierto es que, para hablar del papel tan importante de la mujer en la música, necesitaríamos escribir un artículo de más de cien páginas, ¡seguro!

Los dejo con un video de Alejandro Filio con su canción “Mujer que camina”. Para quienes tenemos la fortuna de compartir nuestra vida con una mujer, estaría muy bien dedicarle esta canción o, por qué no, hasta cantársela.