Los lentes y la literatura
Germán Montalvo
Miguel Campos Ramos, en su texto de presentación para este número dedicado a la literatura, nos dice que ésta sirve para transportarnos a diferentes escenarios. Leer y releer es una práctica que tenemos ahí en los libros que nos acompañan en nuestro buró.
Siempre recomiendo El arte de la fuga, del gran escritor mexicano Sergio Pitol (1933-2018). Y sobre todo indico leer el primer texto: Todo está en todas las cosas. Es magistral la historia. Pitol, viajando en tren por Italia, decide hacer una escala en Venecia para caminar por esa bella ciudad, pero pierde sus lentes, lo cual le ofrece una Venecia indefinida, con poca nitidez, borrosa. La falta de una mirada detallada hace que Pitol reinvente imágenes, rememore desde los muros deslavados y sin la definición que sus lentes le podrían ofrecer los lienzos de Rothko, Malevich, Picasso. La literatura de Sergio Pitol nos ofrece una oferta en educación visual; mencionar a estos tres artistas de vanguardia del siglo XX nos amplia el horizonte. Que ironía, si Pitol no hubiese perdido sus lentes esa historia no habría sucedido, el horizonte para el escritor hubiese sido el mismo. Pitol recibió el Premio Cervantes en 2005.
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