Aprender una palabra nueva cada día
MINUCIAS DEL IDIOMA
Miguel Campos Ramos
Siempre he sostenido que la falta de un vocabulario amplio es una de las principales causas de la incomprensión lectora en los alumnos de todos los niveles.
Es decir, si un alumno lee un texto (trátese de literatura, historia o de una descripción para realizar un experimento en el laboratorio) y se topa con una palabra nueva, corre el riesgo de no entender lo que lee debido a que desconoce dicha palabra. La solución es que acuda al diccionario y aclare su significado. Y, por supuesto, que se la aprenda y la use. De este modo, cuando en el texto vuelva a leer tal palabra, ya sabe qué significa y por tanto entiende lo que lee. Y así será cuantas veces vuelva a toparse con esa palabra, sea el texto que sea.
Un caso. La novela Don Quijote de la Mancha es casi un imposible para los estudiantes, no sólo por su extensión sino por su vocabulario; para colmo, muchos de los términos son arcaísmos, es decir, palabras que existen pero que ya casi no se usan, aunque se deban conocer para entender esa novela.
Veamos como ejemplo esta frase: “no ha mucho que vivía un hidalgo…”.
Cuando el alumno llega a la palabra “hidalgo” no la entiende y entonces deduce que es una novela difícil, y la rehúye.
Pero al ver el diccionario, descubre que “hidalgo” se refería a un hombre de buen nivel económico que tenía una propiedad, y además era hijo de alguien importante, pues “higaldo” derivó de la expresión “hijodalgo”, que a su vez fue una contracción de “hijo de alguien”. Recordemos que los caballeros de hace siglos se ofendían diciéndose: “Vos sois un hijo de nadie; yo en cambio soy hijo de alguien”, es decir, un “hijodalgo” o “hidalgo”. Así, al entender esta palabra, comprende bien qué era Don Qijote.
De manera que un vocabulario rico permite una mejor y más fácil comprensión lectora.
Para lograrlo, es recomendable aprenderse diario una palabra nueva y utilizarla. Así, al año habremos aprendido 365, y en 10 años, nuestro acervo léxico habrá llegado a 3650 palabras. Si esto lo practica un estudiante desde los diez o doce años, imaginemos cuántos miles de palabras nuevas conocerá en sus varias décadas de vida.
Como consecuencia, podrá comprender sin problema cualquier texto.
Ojalá que esto se practicara en las escuelas.
camposramos@outlook.es
Canal YouTube: @miguelcamposramos6715
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