Diga no a los gerundios
MINUCIAS DEL IDIOMA
Miguel Campos Ramos
No cabe duda de que el grado de dificultad del gerundio es alto, y en el nombre lleva la penitencia.
Para empezar, hay que decir que no es recomendable en cualquier verbo, pues, en efecto, en verbos como “dormir”, “morir” y otros que implican “actos acabados”, no se puede en sentido estricto estar “durmiendo” (a menos que se haga a ratos, con intervalos en los cuales se despierta uno y se vuelve a dormir), ni “muriendo”, a menos que, igual, se “reviva” y se vuelva a “morir” una y otra vez. Porque el gerundio implica una acción que “dura” o que “permanece”.
Por si esto fuera poco, existe una normatividad que establece al menos ocho o nueve formas aceptadas del gerundio, y unas cuatro o cinco erróneas.
En el fondo, sin embargo, y para efectos de una redacción que cumpla los requisitos básicos de “claridad”, “sencillez”, “precisión” y “concisión”, los gerundios no son muy recomendables, excepto cuando lo que expresan es simultáneo a la acción central, es decir, al verbo principal. Por ejemplo: “Yo como hablando”, “Tú estudias oyendo música”. En estos dos ejemplos queda claro que se habla y se oye música simultáneamente a las acciones de “comer” y “estudiar”. Ambas cosas se pueden hacer.
El uso del gerundio es muy común en textos jurídicos, así como en boletines y notas de prensa.
El siguiente es un texto ficticio que no se diferencia mucho de uno que otro boletín de prensa o de una que otra nota periodística:
“El ayuntamiento anunció el inicio de las obras del bulevar Atlixco, teniendo pendientes las de avenida Reforma, preparándose estas para el próximo año, considerándolas parte de la obra total de la administración, aprobándose para ello un total de 200 millones de pesos.”
Como ve el lector, parece que el ayuntamiento anunció el inicio de las obras del bulevar, mientras tiene pendientes las de avenida Reforma, que paralelamente están preparándose para el próximo año, mientras al mismo tiempo se consideran estas obras parte de toda la obra municipal, en tanto se está aprobando para el total de esta la cantidad referida… ¡Puf! O sea: todo ocurre mientras el ayuntamiento está anunciando las obras del bulevar…
¿No es mejor escribir el párrafo así:
“El ayuntamiento anunció el inicio de las obras del bulevar Atlixco. Informó además que están pendientes las de avenida Reforma, que se preparan para el próximo año. Ambas obras se consideran parte de la obra total de la administración municipal y su presupuesto global es de 200 millones de pesos.”?
¿Verdad que es más claro?
Por supuesto: como que no se usó ningún gerundio.
Por eso es claro.
Cuidado pues con estas formas verbales. Si las usa, apréndase las 13 ó 14 reglas de su uso. Si no, mejor elúdalo y use verbos activos.
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