Entre letras y cine: 5 cintas sobre escritores

Algunos dirán que pocas cosas son menos interesantes que el ver a un escritor en pleno oficio de escribir o lo que hace cuando no, pero lo cierto es que el séptimo arte en muchas ocasiones ha nutrido sus historias narrando precisamente eso, el momento cuando el mundo interno es tan grande que no queda más a quien lo vive que sentarse y ponerlo todo por escrito. 

De bloqueos, pasión, catarsis y letras es este listado donde el oficio de alumbrar historias se convierte en una historia en sí misma. 

1.- Barton Fink 

(1991, Joel y Ethan Coen) 

Ya que finalmente The Batman le ha dado el tan merecido reconocimiento mainstream al legendario John Turturro, vale mucho la pena revisitar esta obra maestra que en 1991 arrasó en el Festival de Cannes; la historia de Barton Fink, prometedor escritor que tiene que vender su talento para poder comer al mismo tiempo que lucha contra un brutal bloqueo de escritor, es un descenso al infierno surreal donde la procrastinación nunca se ha visto tan monstruosa y divertida. 

2.- Betty Blue 

(1986, Jean Jacques Beneix) 

En 1986 parecía que el cine de arte sólo podía tratar de la belleza y tormento de Beatrice Dalle en esta cinta donde el malditismo que en muchas ocasiones abraza el cliché del escritor es llevado a extremos. Artificiosa, triste y adolescente, pero también una de las radiografías máximas sobre la obsesión malsana por buscar un tormento para poder alumbrar mundos. Y ese final. Ese triste final… 

3.- Una mujer difícil 

(2004, Tod Williams) 

Pocos escritores más cinematográficos que John Irving (no en balde ganó el Óscar a mejor guion original por adaptar esa obra maestra suya que es Las reglas de la vida), y aquí Tod Williams lo demuestra tomando la mejor y más interesante parte de su novela homónima para narrar la historia de un joven aspirante a escritor que al acercarse a su héroe queda envuelto en una trama de infidelidad y rencor que lo acercan a lo mismo que Ícaro al acercarse al sol. Y mucho antes del Óscar aquí Jeff Bridges ya demostraba lo grande que hoy sabemos es. Imperdible. 

4.- La Dolce Vita 

(1959, Federico Fellini) 

Marcello (interpretado por ese monstruo que era Marcello Mastroianni) se la pasa prometiendo una novela que no escribe, al mismo tiempo que vive cosas que crearían una obra maestra; cinta mayor del cine y quizá obra maestra de su director y protagonista, el ocio nunca se había visto tan chic y envidiable como aquí. Verla en Tandem con Chicos Prodigiosos (2000), de Curtis Hanson, para el otro lado de lo mismo. El caótico. 

5.- 2046 

(2004, Wong Kar Wai) 

Es curioso que este maestro de los silencios en la gran pantalla (Ver su In the mood  for love, para mayor y mejor evidencia) haya creado una de las mejores cintas sobre la escritura y su diálogo con quienes somos; a principios de los 60, un escritor y seductor serial se encierra para escribir la novela de ciencia ficción que le permita olvidar. Obvio, acaba recordándolo todo. Junto con Providence, de Alain Resnais (1976), la mejor cinta sobre el insomnio de la creatividad. 

Agustín Ortiz 

joseagustinortiz86@gmail.com