La importancia de la pedagogía en la educación

SABER PROFUNDO 

Jorge A. Rodríguez y Morgado 

 

 

“La infancia tiene sus propias maneras de ver, pensar y sentir. Nada hay más insensato que pretender sustituirlas por las de los adultos.” 

Jacques Rousseau  

 

 

La relación entre pedagogía y educación es sumamente estrecha, ambos conceptos tienen que ver con ayudar al ser humano a desarrollarse. Mientras que la Educación trata de estimular el desarrollo de las capacidades tanto físicas como cognitivas de la persona para poder integrarse de una forma normal en su entorno, la Pedagogía enfoca su atención a lograr el tipo de ciudadano que una sociedad quiere formar, desarrollando la creatividad, el espíritu crítico y la sensibilidad artística. 

Quien ejerce la Pedagogía conoce a detalle el proceso educativo y lo observa como la constante transformación del ser humano hacia un ideal de igualdad y perfección de la sociedad. La pedagogía es una disciplina fundamental para el desarrollo de la educación y el aprendizaje. 

Debemos acudir a la etimología de las palabras para buscar lo “vivo” de ellas en sus orígenes. La palabra educación proviene del latín educare, que significan “conducir”, “guiar”, “orientar”, “extraer de dentro hacia fuera”. La palabra “pedagogía” proviene del griego paidagogía, que se compone de paidon (niño) y ago (yo conduzco), significando la persona encargada de llevar de la mano a los niños. 

El objetivo de la pedagogía es proporcionar los recursos necesario para planificar, evaluar y ejecutar los procesos de enseñanza y aprendizaje. Su objetivo es mejorar los ideales y las prácticas educativas, y diseñar ambientes de aprendizaje motivadores, innovadores e inclusivos y participativos.  

La pedagogía tiene su origen en la Antigua Grecia, donde los primeros pedagogos eran esclavos que se encargaban de llevar a los niños a la escuela. El término pedagogía empezó a ser utilizado a finales del siglo XVI y se hizo evidente en la obra de Juan Calvino (1509-1564) titulada “La institución cristiana”, escrita en 1536. En el siglo XVIII, la pedagogía tradicional se gestó con el surgimiento de la escuela como institución, consolidándose como ciencia en el siglo XIX. La pedagogía cobró fuerza en el siglo XX, después de la Primera Guerra Mundial.  

A lo largo de la historia, han surgido numerosos pedagogos que han dejado un legado significativo en esta área. Desde los clásicos como Platón y Aristóteles hasta los más contemporáneos que han influido en cómo se practica la enseñanza hoy en día.  

Entre ellos destacan: Juan Jacobo Rousseau (1712-1778), consideraba que, en el estado natural, el hombre nace bueno y libre, mientras que la sociedad lo corrompe. Johann Friedrich Herbart (1776-1841), quien lucha por hacer de la pedagogía una ciencia. August W. Friedrich Fröbel (1782-1852), precursores de la escuela activa (aprender haciendo). John Dewey (1859-1952): para él la educación es un proceso de la vida y no una preparación para la vida.  

Además, María Montessori (1870-1952) puso al niño como protagonista del proceso de aprendizaje, era la escuela la que se tenía que adaptar a los pequeños y no al revés. Jean Piaget (1896-1980) estableció que el conocimiento no es una copia de la realidad, sino una construcción que cada persona elabora a partir de información que ya posee y de la interacción con su entorno. Paulo Freire (1921-1997): la tarea de educar es crear en el alumno un proceso de recreación, comunicación, socialización, de búsqueda de solidaridad e independencia y autonomía. 

Sobre estos pedagogos sobresale Juan Amos Comenio (1592-1670), teólogo, filósofo y educador que es considerado “El padre de la pedagogía moderna”. Escribió distintas obras pedagógicas, filosóficas y teológicas, entre ellas la famosa “Didáctica Magna”, en la que propone el ideal de la pansofía (enseñar todo a todos). Su fin apunta a que la formación del ser humano debía prepararse para la vida y no sólo para una profesión. 

En México, la pedagogía se originó en 1881 con la impartición de cursos pedagógicos. Se instituyó como formación específica en 1910, cuando Justo Sierra presentó, primero, la Ley Constitutiva de la Escuela Nacional de Altos Estudios, y, después, el proyecto para la fundación de la Universidad Nacional.  

José Vasconcelos fue un importante promotor de la educación en México, su obra “La raza cósmica” propone una visión integradora de la sociedad mexicana, que incluye a todas las razas y culturas. Fundó la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) y la Secretaría de Educación Pública (SEP).  

No podían faltar otros grandes pedagogos que han revolucionado la enseñanza, como: Enrique C. Rébsamen, fundador de la primera escuela normal en México, desarrolló un método de enseñanza basado en la observación, el diálogo y la experimentación. También fundó la Escuela Nacional Preparatoria. Ignacio Manuel Altamirano, quien  promovió la educación como medio para la formación del ciudadano y la construcción de una sociedad más justa.  

Concluyo esta entrega con una frase de Paulo Coelho que da la esencia de un verdadero educador: “Un maestro no es aquel que solamente enseña algo, sino aquel que inspira al alumno a dar lo mejor de sí para descubrir un conocimiento que ya tiene dentro de su alma”. De aquí la importancia de la pedagogía en la educación. 

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