Sebastiao Salgado

Germán Montalvo 

Amazonia, la última exposición de Sebastiao Salgado (Brasil, 1944-2025), se presentó en el Museo Nacional de Antropología de la Ciudad de México, del 7 de febrero al 4 de mayo de este 2025. A tan sólo dos semanas de haber concluido, tristemente nos enteramos de su fallecimiento en la ciudad de París. Salgado, quien estudió economía, es un hito del arte de mirar, por muchas razones. La que a todos sorprende es la riqueza tonal del blanco y el negro que da relieve a sus imágenes: gente envuelta en diferentes escenarios, revelaciones del ser humano en conflicto, etnias en convivencia congruente con su entorno, explotación laboral, niños, mujeres, hombres en la selva de las amazonas. Y ése fue uno de sus legados: mostrar a través de su fotografía el registro de la importancia de la conservación de la naturaleza. No es gratuito que Salgado haya fundado el Instituto Terra, iniciativa que permitió salvar áreas naturales en riesgo de desaparecer. La presencia de su exposición en el Museo Nacional de Antropología es muy congruente; ahí, en el museo que resguarda la historia de una de las culturas más ricas del mundo, sus imágenes convivieron con el pasado olmeca, azteca, maya. Salgado reconoció a la ciudad de México como uno de los espacios con más árboles, y a México como un país que amó y recorrió en diferentes ocasiones. Queda como testimonio la entrevista que le hizo con motivo de esta exposición nuestro gran escritor mexicano Juan Villoro. Crítico feroz de Bolsonaro, decía: “Antes de hacer clic a la cámara, hay que estar ligado al fenómeno.” En Sibarita la Revista lo recordamos en esta sección llamada HITOS, para distinguir a las personas que dejaron una huella imborrable. Salgado fue un autodidacta de la fotografía; de forma inesperada comenzó a tomar fotografías con la cámara de su mujer, Lélia Deluiz Wanick.