Cada día más cerca de ti

Me estoy acercando a ti, solo fue cosa de tiempo.

Disfruté, gocé y viví. De todo, no me arrepiento. 

Fuiste un apoyo importante y no se debe negar. 

Todo el bien que me otorgaste, imposible de olvidar. 

 

De esas energías divinas, hiciste que yo naciera, 

Del amor profundo y firme, de una pareja sincera. 

La naturaleza opera firme y con plena conciencia,  

sabe que el ser engendrado buscará siempre su esencia. 

 

Muchos seres has creado a lo largo de la historia, 

su existencia será breve, sin que exista moratoria. 

Espacio y tiempo le otorgas a toda la humanidad, 

para cumplir Tu mandato, en esta gran dualidad. 

 

Permíteme Gran Señor comentarte algunas cosas, 

donde va mi sentimiento y además te traigo rosas. 

Te agradezco en la mañana, también al atardecer, 

puesto que me has concedido, cada día el renacer. 

 

El ver las cosas que Tú haces, con ese poder inmenso. 

Hace sentirme grandioso, por eso te prendo incienso. 

Estas criaturas vivientes y también las que se han ido, 

eternamente agradecen, todo de Ti lo aprendido. 

 

Cuando amanece agradezco, por lo que me has otorgado, 

También al anochecer, por todo lo que he gozado.   

Somos los seres humanos tu imagen y semejanza, 

de una vida limpia, pura y de una muy buena crianza.  

 

Tus enseñanzas divinas, nos hacen ser fraternales. 

Y con ese santo ejemplo, se hacen cosas no triviales, 

es por eso que te ofrezco, mi oración a raudales, 

se te agradece infinito, ya que llena mis ideales. 

 

La energía que Tú nos mandas, genera un inmenso amor. 

Sabiéndola aprovechar, liberamos el dolor. 

El conducirnos por Ti, es un verdadero honor. 

No es muy fácil el camino, requiere mucho valor. 

 

Luz y oscuridad surgieron en esta vida otorgada, 

al final ha sido grato, pues llegaré a tu morada. 

Sangre y lágrimas tiradas en ese duro sendero,  

el camino ha sido duro, pero se templó el acero. 

 

Ya pronto estaremos juntos, lo digo muy convencido. 

Dicha, dolor y placer, es parte de lo vivido. 

No sé si me falta poco, nada de mí se ha perdido, 

solo sé que, por ahora, tengo vida y agradecido. 

 

 

Jorge A. Rodríguez y Morgado 

Compartir

About Author

Related Post

Leave us a reply